El comercio de armas
¡Hola a todos!
Comparto con vosotros un vídeo del Papa acerca del comercio de armas.
Cada día millones de personas viven amenazadas por la violencia armada debido a las miles de armas que circulan por el mundo. Según algunas estadísticas, cada año se fabrican 8 millones de armas y 16 millones de balas. El 70 % de las ventas de armas está en manos de Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido. En cambio, los países europeos fabricantes son Alemania, España e Italia.
Por consiguiente, el comercio de armas está en auge y, además, España es uno de los países que más aprovecha el crecimiento en este mercado situándose en el séptimo mayor exportador mundial. El cliente fundamental de España es Australia.
Varios estados han firmado el Tratado sobre el Comercio de Armas de la ONU y otros tienen una legislación propia. Aún así, no se puede saber con plena seguridad si se cumplen estos tratados internacionales. Pues muchas ONG, señalan que este tratado no obliga al gobierno a dar información detallada del producto exportado y tampoco establece un control sobre el destino y finalidad de este.
España fue uno de los primeros Estados en firmar el TCA, en 2013 que estable la norma de "no autorizar armas para cometer atrocidades". El Tratado de Comercio de Armas es una iniciativa que pretende mejorar la regulación en el comercio de armas convencionales y, sobretodo, evitar las muertes de personas inocentes. Asimismo, se prohíbe transferir armas a otros países si saben que serán utilizadas para cometer crímenes, evitando que se utilicen para cometer actos de violencia de género o violencia contra niños.
El gasto militar global ha aumentado en los últimos diez años. Los principales receptores de armas son los siguientes: India, Arabia Saudí, China, Australia, Turquía, Pakistán, Vietnam, EEUU y Corea del Sur. Se venden bombas, aviones, munición y misiles y, los lugares de destino, hay ejemplos claros de violaciones del derecho internacional al ser utilizadas como crímenes de guerra. Pese al panorama bélico que hay actualmente y la grave situación que está causando la migración de los refugiados, las empresas armamentísticas siguen vendiendo armamento a países de Oriente Medio y el norte de África. Por esta razón, la Unión Europea quiere acabar con la responsabilidad por haber permitido durante muchos años que estas empresas exportaran a estos mismos países el armamento.
El fin primordial de este comercio debería ser la protección de la población y los gobiernos son los encargados de regularlo, suspenderlo o incluso prohibir la producción.
El Papa con este vídeo intenta mostrarnos la realidad y su objetivo es eliminar este tipo de comercio que está acabando con millones de vidas. Pues, tiene toda la razón al decir que se habla de paz pero promovemos y permitimos el comercio de armas. Es una contradicción porque si queremos paz en el mundo no podemos incitar a las personas a conflictos y a la violencia.
¿Para qué queremos realmente las armas? ¿Para defendernos o para provocar una guerra y enriquecernos aún más? Los Estados más poderosos nos manipulan y controlan a su antojo con el único propósito de obtener dinero, es decir, por motivos económicos. No les importa cuantas personas mueran o resulten heridas, si son tomadas como rehenes o sufren tortura. Porque para ellos, como dijo Nicolás Maquiavelo, el fin justifica los medios.
Pero estos problemas van más allá de los países en conflictos bélicos porque, por ejemplo, en Corea del Norte anuncian programas de desarrollo de sofisticados sistemas de armamento cuando las condiciones de vida de los ciudadanos son precarias. Mostrando una carrera armamentista, en otras palabras, una rivalidad entre países para desarrollar las mayores fuerzas armadas como la que tuvo lugar en la Guerra Fría.
El Objetivo 16 de los ODS es promover sociedades justas y pacíficas. Este objetivo se centra en la promoción de un acceso universal a la justicia y la construcción de instituciones responsables y eficaces. Para ello, es necesario acabar con la corrupción existente en el poder judicial y en la policía de muchos países. Sus metas son las siguientes: reducir todas las formas de violencia y las tasas de mortalidad; poner fin al maltrato, la explotación, la trata y todas las formas de violencia y tortura contra los niños; garantizar la igualdad de acceso a la justicia; reducir la corrupción y el soborno; crear instituciones eficaces y transparentes; etc.
Si no sabes que puedes hacer desde casa, haz click en este enlace y lee la guía para salvar el mundo.
Saludos,
Patri
Comentarios
Publicar un comentario