Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)

¡Hola a todos!
Por fin he vuelto después de dos semanas de vacaciones. Antes de nada, ¡feliz 2018!
Hoy, os traigo un vídeo explicativo sobre qué son los ODS y una pequeña reflexión.

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) son el resultado del acuerdo alcanzado por las Naciones Unidas y se componen de una declaración, 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible y 169 metas. Los Estados implicados han convenido en tratar de alcanzarlos para 2030 y son por tanto, un llamado universal que pretende poner fin a la pobreza, proteger el planeta y garantizar la paz y prosperidad. Los objetivos se pusieron en marcha en 2016 y reciben el apoyo del PNUD, es decir, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. 

Estos 17 objetivos se basan en los logros de los OD del Milenio, incluyendo el cambio climático, la desigualdad económica, la innovación, el consumo sostenible, etc. Todos estos se centran en mejorar la igualdad para responder a las necesidades de mujeres, niños y las personas más necesitadas. Asimismo, abordan las causas fundamentales de la pobreza y unen a la sociedad para lograr un cambio positivo en todo el planeta.

La sostenibilidad es el desarrollo que satisface las necesidades actuales sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras que garantiza el equilibrio entre el crecimiento económico, el cuidado del medio ambiente y el bienestar social. El desarrollo sostenible surge por primera vez en 1987 con la publicación del Informe Brundtland que alertó a la población de las consecuencias medioambientales y la globalización. Hay tres tipos de sostenibilidad: sostenibilidad social, sostenibilidad económica y sostenibilidad ambiental. 

En resumen, los objetivos principales son erradicar la pobreza y el hambre, universalizar el acceso a servicios básicos (ejemplos: agua o comida) y apoyar la generación de oportunidades de desarrollo a través de la educación. Por añadidura, fomentar la innovación e infraestructuras creando comunidades, cuidar el medio ambiente acabando con el cambio climático y reducir las desigualdades en el mundo.

En este último siglo hemos avanzado tecnológicamente, sin embargo, el pensamiento y la forma de vivir en algunos países sigue sin variar. Por tanto, si queremos dejar a las generaciones futuras un planeta donde vivir, deben colaborar los gobiernos, el sector privado y los ciudadanos por igual. La Iglesia tiene que estar implicada en los ODS porque su perspectiva coincide con la mayoría de objetivos explicados así como la lucha contra el hambre o la igualdad de género. Además, el Papa sería un claro ejemplo a seguir para muchos cristianos que pondrían su granito de arena en esta etapa de cambio. 

Saludos,

Patri